Para mi estar enamorada era una tontería, sólo un cuento de hadas. Que no hay ningún principe azul, que éste no peleará por mi, que la magia no existe, y que todos los finales no son felices.
Pero apareciste tú, tú con todo lo tuyo, con tus tonterías, con tus desfases, con tus sentimientos, con todo lo que puedes desear. Y desde hace ya 7 meses he aprendido que no hace falta un cuento de hadas para ser feliz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario